Todos «sabemos» el poder que tiene, pero aún así no la aprovechamos. Nuestra respiración
Recuerdo cuando comencé a regular la ansiedad con la respiración; ese día salí sola a hacer varias diligencias, tenía pocos meses de haberme ido de mi país totalmente sola y la tristeza de alejarme de mi hogar más el miedo a tantos cambios habían hecho salir de mi varios demonios (miedos muy profundos), y ese día mientras iba caminando por el paso peatonal de una avenida de repente comencé a sentir que mi corazón de la nada se comenzaba a acelerar, me costaba respirar, me parecía confuso todo lo que estaba sucediendo, veía los carros pasar, las personas caminando y solo sentía que me ahogaba y que a la vez, quería salir corriendo.
Estaba teniendo un ataque de ansiedad.
Hacía varios meses que estaba meditando y haciendo ejercicios de respiración así que ese día, de milagro, recordé un ejercicio de respiración, tenía tiempo conociéndolo pero me costaba ponerlo en práctica, así que comencé a enfocarme en mi respiración, inhalar profundo y exhalar todo el aire mientras me repetía, todo está bien, Dios te sostiene, todo está bien. Continué haciéndolo quién sabe por cuanto tiempo.
Así logré continuar con mis actividades aquel día, pero claro que me tomó meses, terapia y coaching seguir afianzando esta capacidad de sostenerme y apoyarme; y la verdad, cada vez seguimos avanzando y aprendiendo más y más.
Hoy en día con tantos estímulos, tanta rapidez, tanta dopamina de mala calidad, es muy fácil que nos sintamos ansiosos y des regulados a nivel mental y emocional. Por eso quiero convencerte de que uses ese súper poder que tienes en tu sistema respiratorio.
Si aún no estás convencid@ … déjame contarte
Seguro al igual que yo estas cansad@ de escuchar cuando estás estresad@ o ante alguna situación de tensión ese famoso «respira profundo.. . inhala y exhala».
Pero ¿por qué la respiración puede ayudarnos tanto? ¿cuál es la razón? Aquí te doy algunos facts para que tu mente se convenza y así sea más fácil que comiences a integrar estás prácticas.
- El ritmo respiratorio cambia según nuestras emociones ¿lo has notado? si estamos ansiosos nuestra respiración es rápida y superficial, pero si estamos molestos la inhalación es más pesada, si estamos tristes la exhalación es más larga y la inhalación débil, y al estar felices la inhalación es más profunda y expansiva.
Esto funciona en ambos sentidos, cuando cambiamos nuestro patrón respiratorio también podemos cambiar cómo nos sentimos, si respiramos de forma más calmada y equilibrada también equilibramos nuestra mente y emociones.
2. Cuando respiramos de manera profunda estamos «activando» mucho más nuestro músculo diafragma, este músculo a su vez estimula nuestro Nervio Vago, el cual activa nuestra respuesta de relajación, es decir, nuestro sistema nervioso parasímpatico.
3. La respiración nos trae al único momento que existe, EL PRESENTE, alejándonos de los arrepentimientos y culpas del pasado o de las preocupaciones del futuro, y en el presente no solo podemos encontrar calma, sino que es el único momento con infinito potencial para crear y experimentar nuestra vida.
4. Y 4to con nuestra respiración podemos ayudarnos a sentir y soltar emociones que aunque puedan parecer complejas son dignas de ser sentidas y son valiosas mensajeras, solo necesitan ser sentidas para poder salir de nuestro cuerpo y darnos la claridad que necesitamos.
Así que te invito a practicar este pequeño ejercicio llamado Box Breathing:
- Inhala y exhala profundo dejando salir todo el aire
- a continuación inhala en 4 tiempos, manten el aire por 4 tiempos, exhala en 4 tiempos y mantente sin aire por 4 tiempos.
- repite esta respiración unas 10 veces o las que sean necesarias y nota cómo te sientes.
Espero que puedas poner en práctica este ejercicio y apreciar el regalo que tienes en ti. Un abrazo 💖